BOLETÍN DE LA SOCIEDAD GEOLÓGICA MEXICANA, Vol. 54, n.. 1, 2001, p. 28-66 http://dx.doi.org/10.18268/BSGM2001v54n1a4

Tectonic history of the Chihuahua trough, Mexico and adjacent USA, Part I: the pre-Mesozoic setting

Walter T. Haenggi

2007 Tradewinds Drive, Missouri City, TX 77459-2331

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Resumen

Las estructuras de una amplia zona de lineamientos de orientación noroeste, localizada a lo largo del margen suroeste del cratón de Norteamérica, han estado activos recurrentemente desde el Proterozoico Medio. Los datos estratigráficos y estructurales indican la influencia de esta zona en la geología del Paleozoico, Mesozoico, Terciario y Reciente del noreste de Chihuahua.

El Carrizo Mountain Group, con edad estimada en 1,400 a 1,300 Ma, debe haberse depositado en una cuenca (¿graben de orientación noroeste?). Ejemplos aislados de rocas graníticas “antiguas” (ca. 1,350 – 1,270 Ma) sugieren magmatismo distribuido en una amplia área de Chihuahua, que en parte es coetáneo con el emplazamiento de rocas graníticas hacia el norte. La cuenca (¿graben?) del Carrizo Mountain Group puede ser la primera manifestación del grano estructural de orientación noroeste que domina en la región. La edad es consistente con la de los movimientos de fallas laterales más antiguos a lo largo de la zona del Texas Lineament (Stockton Pass, Arizona, ca.1,370± 70 Ma).

Siguiendo al depósito del Carrizo Mountain Group, áreas al norte y noroeste de la zona donde se encuentra este grupo fueron afectadas por el inferido De Baca rift a 1,260-1,160 Ma. El rift probablemente se extendió hasta la parte norte de Chihuahua y las rocas metasedimentarias registran incursiones marinas, presumiblemente desde un océano localizado hacia el sur. Se postula que las rocas metasedimentarias y basálticas De Baca/Swisher representan un rift intracontinental y que existe una relación genética entre ellas y el rift Midcontinental. Aproximadamente al mismo tiempo en que ocurría el rifting, un primer evento metamórfico afectó a las rocas del Carrizo Mountain Group. Alrededor de los 1,100 Ma, la región fue sujeta al diastrofismo “Grenville”, que incluyó emplazamiento extensivo de batolitos, cabalgamientos, metamorfismo retrógrado y el depósito sinorogénico de la Formación Hazel.

Las rocas paleozoicas pre-misisípicas de la región fueron la consecuencia de la depositación distribuida ampliamente en la plataforma cratónica, a lo largo de un margen relativamente pasivo del cratón de Norteamérica. Rocas cámbricas y ordovícicas incluyen areniscas basales transgresivas que reflejan un avance general hacia el noreste de los mares sobre Norteamérica. El evento más importante durante el Paleozoico temprano, fue un cambio en el límite del cratón norteamericano durante el Ordovícico. Aproximadamente a los 450 Ma, el terreno Cuyania se separó del cratón y eventualmente fue acrecionado a Sudamérica. El fallamiento local del Ordovícico, Silúrico y Devónico en Texas y Nuevo México, y las discordancias en la Diablo Platformy en la parte central de Nuevo México, indican eventos de exposición de la plataforma. Estas características pueden reflejar actividad tectónica en grandes áreas, incluyendo la parte norte de Chihuahua, pero su origen y significado aún no es claro.

Cuatro pulsos tectónicos del Paleozoico tardío, que afectaron al sistema Ouachita-Marathon, se reconocen en el noreste de Chihuahua y zonas adyacentes de Estados Unidos: 1) deformación en el postpaís del Ouachita durante el Misisípico-Pensilvánico; 2) orogenia pensilvánica; 3) plegamiento y cabalgamiento del Pensilvánico-Pérmico; 4) erosión/ truncación del Pérmico y basculamiento subsecuente.

Palabras clave: Cuenca de Chihuahua, estratigrafía, tectónica, Precámbrico, Paleozoico.